Fuerte sismo en el sur de Chile activa alerta de tsunami

Por Juan Pablo Ojeda

Un terremoto de magnitud 7.5 estremeció la mañana de este viernes el extremo sur de Chile, provocando una alerta de tsunami para todo el borde costero de la Región de Magallanes, incluyendo Punta Arenas, Puerto Williams y el Territorio Antártico Chileno. La sacudida ocurrió a las 8:58 horas, según reportes preliminares del Centro Sismológico Nacional (CSN), con un epicentro ubicado a más de 218 kilómetros al sur de Puerto Williams, a una profundidad de solo 10 kilómetros, lo que intensificó su percepción en la zona.

Como respuesta inmediata, el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (SHOA) emitió una alerta de tsunami, activando todos los protocolos de evacuación. El Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred) solicitó a la población evacuar el borde costero de forma preventiva, una medida que se extendió hasta el territorio antártico chileno, donde se decretó estado de precaución en las playas.

El presidente chileno, Gabriel Boric, quien es originario de Punta Arenas, fue uno de los primeros en reaccionar públicamente. A través de su cuenta oficial en X (antes Twitter), hizo un llamado directo a la ciudadanía:

“Llamamos a evacuar el borde costero en toda la Región de Magallanes. En estos momentos, nuestro deber es prevenir y hacer caso a las autoridades”.

Asimismo, informó que el Comité para la Gestión del Riesgo de Desastres (Cogrid), tanto regional como nacional, ya está en funciones y que todos los recursos del Estado están movilizados para enfrentar cualquier eventualidad derivada del fenómeno.

Hasta el momento, no se han registrado daños materiales ni personas heridas, pero las autoridades mantienen un monitoreo constante ante la posibilidad de variaciones anómalas en el nivel del mar. La población ha seguido las instrucciones de evacuación con serenidad, aunque el temor por la magnitud del sismo persiste.

Chile, un país situado sobre el Cinturón de Fuego del Pacífico, está acostumbrado a convivir con la amenaza sísmica. Sin embargo, un movimiento de esta magnitud en una zona tan austral es poco frecuente, y la alerta generada pone a prueba no solo la capacidad de respuesta de las instituciones, sino también la conciencia y preparación ciudadana en una de las regiones más remotas del país.