Enfrentamiento en frontera deja soldado herido y alerta binacional

Por Juan Pablo Ojeda

Un nuevo episodio de violencia sacudió la frontera entre México y Guatemala luego de que un soldado guatemalteco resultara herido durante un enfrentamiento armado con presuntos narcotraficantes mexicanos en la comunidad de Agua Zarca, municipio de Santa Ana Huista, Huehuetenango. Según el Ministerio de la Defensa Nacional (Mindef), la agresión ocurrió cuando hombres fuertemente armados cruzaron desde el lado mexicano y abrieron fuego contra varias localidades fronterizas.

La vocera del Ejército guatemalteco explicó que los disparos provinieron de grupos armados que ingresaron desde zonas limítrofes de Huehuetenango y San Marcos. En ese momento, tropas realizaban patrullajes de rutina en Agua Zarca, lo que derivó en el choque directo. Un militar terminó herido en una de sus extremidades, pero fue reportado fuera de peligro.

Tras el ataque, unidades adicionales de la Fuerza Armada reforzaron la seguridad en la región para proteger a las comunidades, un área históricamente afectada por el tránsito de estructuras criminales que operan en ambos lados de la frontera. Durante las operaciones posteriores, soldados localizaron armamento, explosivos y equipo de vigilancia —incluidos drones— que fueron asegurados y puestos a disposición de las autoridades. La cantidad del decomiso no fue detallada.

Las primeras líneas de investigación apuntan a que los agresores podrían pertenecer al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), aunque el Mindef evitó confirmar la hipótesis. La violencia en esta zona no es nueva: apenas en junio, en La Mesilla, integrantes del cártel conocido como Los Pakales (o Cártel Chiapas-Guatemala) cruzaron a territorio guatemalteco mientras huían de agentes mexicanos, lo que derivó en un enfrentamiento que dejó cuatro sicarios abatidos, incluido Baldemar Calderón Carrillo, alias Tío Balde. En aquella ocasión se aseguraron vehículos blindados, armas largas y una lanza granadas.

Ante este nuevo incidente, las autoridades de Guatemala coordinan acciones con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) para reforzar el control fronterizo y evitar que estos grupos criminales sigan explotando la línea divisoria para moverse, esconderse o confrontar a fuerzas de seguridad. El choque en Agua Zarca vuelve a subrayar la fragilidad de la frontera compartida y la necesidad de una cooperación más estrecha entre ambos países para contener la expansión de los cárteles.